¿Y EL PUEBLO ORGANIZADO DONDE ESTA? (IV)
Estamos
a escasamente un mes para cumplirse el primer año del gobierno de PPK. Dada la
característica de la mayoría absoluta con que cuenta el fujimorismo en el
Congreso, se ha dejado notar las contradicciones entre ejecutivo y congreso
(ambos de derecha neoliberal) básicamente en el terreno de cómo servir mejor a la gran burguesía e
igualmente cómo hacer para que en la
población se mantenga ese halo de
esperanza prometido en la campaña electoral.
Sin
embargo, lo que se conocía de manera extraoficial “salió a la luz” oficialmente:
la corrupción desde los más altos niveles del estado. Lo que en otras
circunstancias hubiera servido para traerse abajo al gobierno simplemente se
tomó como algo “natural” en nuestro país, teniendo en cuenta que la cultura del
“roba pero hace obras” está muy entronizado en la mentalidad de muchos
peruanos.
No hay
duda que el llamado “niño costero” perjudico a miles de peruanos pero sirvió de
alivio para la estabilidad política del gobierno, claro está que ahora lo de la
reconstrucción es otra preocupación para quienes esperamos que se ejecute con
transparencia en todos los aspectos.
Como
decíamos al inicio, para este gobierno y el congreso con amplia mayoría
neoliberal, mantener el modelo ha sido y es la preocupación de ambos poderes
del estado, por eso no ha sido extraño que las propuestas del ejecutivo en
temas económicos tiene el respaldo de la bancada fujimorista, en especial, y
los demás congresistas con algunas observaciones por parte del Frente Amplio. Así
mismo en términos represivos legislar en contra de las luchas de sectores
populares es la característica actual, basta con mencionar la Ley de Apología
al Terrorismo, dicha norma deja la puerta abierta para acusar a cualquier
ciudadano de terrorista por el solo hecho de participar en paros o huelgas que
son declarados ilegales, y es muy conocido que la mayoría de las huelgas han
sido declaradas ilegales, o participar en eventos de homenajes a personas que
el estado considera terroristas. Como
siempre hecha la ley, hecha la trampa ( pero la trampa para los pobres).
El comportamiento
abiertamente en contra de los trabajadores es una constante del gobierno,
quedando demostrando una vez más que el denominado Consejo Nacional del Trabajo
es una instancio de compra de conciencias para mantener a los trabajadores
ilusionados y evitar que la lucha de masas de este sector pueda hacer alcanzar
conquistas laborales que mejoren su nivel de vida. No hay que olvidar que el
magisterio es uno de los sectores que en estos momentos enfrenta una situación
laboral difícil, con leyes que han generalizado los contratos (Leyes 29944-30541
para cinco años y 30328 para un año) y otras que aumentan la jornada de
trabajo, de manera obligatoria, sin aumento de remuneración alguna. Es decir la
precarización ha llegado al sector educación; demostrando de esta manera que a
los representantes del neoliberalismo y la gran burguesía peruana les importa
un bledo la educación pública, al extremo de propiciar su eliminación a través
de las llamadas Alianzas Publico Privadas (APP).
Existen
muchos temas más en las cuales el gobierno ha mostrado con claridad su
servilismo al imperialismo norteamericano, al empresariado transnacional y
nacional, como también su nulo deseo de cumplir promesas hechas a incautos,
porque desde el sector del pueblo ya sabíamos cuál iba a ser el comportamiento
de PPK una vez en el gobierno.
La
pregunta sigue siendo ¿Y el pueblo organizado dónde está?. Lo que podemos
verificar, una vez más, es la ausencia de liderazgo, no solo sindical sino
también, político. A la debilidad orgánica y al errado ejercicio del frente
único en los gremios sindicales se suma el afán netamente electoral de la
mayoría de los partidos progresistas y de izquierda, lejos de corregir
“errores” del pasado y recuperar la credibilidad de los hombres y mujeres
explotados y oprimidos de nuestro país, la lucha fratricida por tener algún cupo
en el congreso, municipios o gobernaciones es el tema del día entre estos
partidos. La lucha por la transformación de la patria para convertirla en un
país con justicia social, igualdad de oportunidades y el respeto a ser
diferentes unos de otros, simplemente es parte de la agenda pero solo
teóricamente, igualmente el grito ¡ forjar, crear poder popular !se ha quedado solo en consigna.
Muchos
coinciden en que las condiciones objetivas para llegar al poder están
presentes, igualmente reconocen que las condiciones subjetivas no son de las
mejores, pero todos hacen lo posible por no mejorar estas condiciones
subjetivas. En su momento dijimos, si hubiera existido el FRENTE político de
masas que el pueblo necesita, de manera organizada y enraizada en el pueblo,
estamos seguros que apenas exploto la bomba Odebrecht hubiéramos tenido la
oportunidad para acceder al poder. Lamentablemente carecemos de ese FRENTE político,
y es momento que la reserva moral que existe en cada organización progresista y
de izquierda exija a sus dirigentes actuar con honestidad y consecuencia,
alejando a los corruptos y a los traidores a las luchas del pueblo.
Tanto
el 2018 y 2021 (elecciones municipales y presidencial) no deben ser los
objetivos principales sino parte del cronograma de acción y lucha política para
alcanzar a ser poder. Si las condiciones favorecen con resultados positivos en
dichas elecciones a buena hora, de lo contrario no debe ser motivo de pugnas y
divisiones internas como se ven ahora.
¡ Por
la niñez y juventud, actuemos con madurez !
06 /06
/ 2017.
MI PALABRA
Felipe Torres Andrade
Felipe Torres Andrade
Lima, Perú
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