¿Y EL
PUEBLO QUE GANO?
Con la última
información de la ONPE (100% de escrutinio oficial) y considerando como
referencia el llamado “voto válido” se puede asegurar que el gran ganador de
estas elecciones ha sido el modelo económico neoliberal capitalista. Los
partidos de la derecha, que nunca han cuestionado al modelo, en su conjunto suman casi un 65%, la izquierda
electoral, con algunos matices, críticos a dicho modelo alcanzan casi un 20 % y Frepap con Upp juntos suman 15% de votos
validos; estos dos últimos no tienen una clara posición ideológica con respecto
al modelo neoliberal, el FREPAP es una organización religiosa y Upp se
caracteriza por alquilar su logo a cualquiera.
De este contexto se deduce
claramente que el pueblo seguirá siendo un convidado de piedra en el Congreso,
salvo algunas sorpresas.
Sin
embargo, es importante aclarar que, de un total aproximado de 25 millones de
personas hábiles para votar, casi seis millones y medio no votaron por diferentes
razones (26% de los hábiles) y otro
tanto que votaron en blanco o nulo (14% de los hábiles) , quedando solo un 60% del total de votantes hábiles como votos válidos, de manera tal que ninguno
de los partidos que lograron pasar la valla tiene un porcentaje con la cual
pueden irrogarse la representatividad de la mayoría de la población. Por
ejemplo, el 10.26% que muestra Acción Popular no pasaría de ser realmente solo el 6% del total de
votantes hábiles.
Entonces
¿El pueblo gano algo con estas elecciones? NO, definitivamente NADA que pueda
ir en beneficio directo para los
millones de explotados y oprimidos del Peru. En contraste, el oxígeno que recibe Martin Vizcarra con esta
elección congresal le ha servido para insistir con sus Decretos de Urgencia,
todos lesivos a los intereses de los trabajadores en actividad, de los cesantes
y jubilados y de otros sectores de la población.
Pues
bien, lo que le queda al movimiento popular organizado en sindicatos y frentes
de defensa es consolidar y fortalecer cada una de sus organizaciones e insistir
en unir todas las luchas, centralizarlas y enfrentar este periodo de confrontación
con el estado en las mejores condiciones posibles.
La
lucha es el camino, no hay otra alternativa.
23 / 02
/ 2020
MI PALABRA
Felipe Torres Andrade
Lima-Peru