Empezaremos
por decir que estamos ante un Gobierno Popular pero sumergido en el modelo
económico neoliberal capitalista, sin poder modificar el statu quo de lo que
dejaron los anteriores gobiernos neoliberales.
Son
casi siete meses del actual Gobierno y durante todo este tiempo, incluso desde
mucho antes de su proclamación, ha venido soportado un acoso permanente y
despiadado de la derecha en su conjunto, de la gran prensa y de los grupos de
poder con el objetivo concreto de deslegitimar al Presidente Castillo y lograr
su salida de palacio de gobierno,
Nunca
antes, durante los 200 años de Republica, y en especial en los últimos 30 años
de neoliberalismo “legalizado” por la Constitución de 1993, se había visto un
gran interés por conocer hasta el más mínimo detalle de lo que hace o deja de
hacer el Presidente de la Republica durante las 24 horas del día. Así mismo, cualquier designado para algún
cargo público es investigado, es “desnudado” en todas las formas hasta
encontrar pruebas de su “incapacidad” para el cargo.
¿Está
mal que se vigile, controle y/o denuncie todo lo negativo de este Gobierno
Popular? No, de ninguna manera, inclusive si esto se hubiese practicado con los
gobiernos anteriores de corte neoliberal seguramente no existirían esos agentes
de la corrupción pululando por todas las instituciones y poderes del estado.
Lamentablemente el objetivo principal de quienes hoy llevan adelante este tipo
de “control ciudadano” está orientado a forzar de una u otra manera la salido
de Pedro Castillo de la presidencia y ubicar a alguien identificado plenamente
con el modelo económico neoliberal capitalista. No es extraño, entonces, que
los congresistas golpistas se reúnan en forma pública para planificar sus
acciones sediciosas.
Estos
hechos hacen que el gobierno se mantenga sin poder ejecutar lo que había
prometido durante la campaña electoral y esté actuando totalmente la defensiva tratando de “complacer” los
pedidos de la derecha, llegando al extremo de conformar gabinetes ministeriales
con personajes de dudosa catadura moral identificados plenamente con el modelo
neoliberal. Si bien es cierto que algunos sectores del pueblo que votaron por
Pedro Castillo aún mantienen su respaldo e identificación, en otros empiezan
a surgir las dudas y preocupaciones con
respecto al cumplimiento de compromisos adquiridos. Se podría decir que, por el
momento, todo lo que viene aconteciendo en la economía y en la política es casi
la continuidad del último gobierno conocido
como “gobierno de transición y de emergencia”.
Ahora
bien, ¿Existen razones, causas y responsables para que el Gobierno de Pedro
Castillo no haya podido consolidarse y ejercer una autentica Gestión Democrático-Popular?,
Claro que sí y pasamos a enunciar algunos de ellos.
Entre
las razones principales podemos considerar las reglas de juego con las que fue
elegido Pedro Castillo, con el soporte legal que significa la apócrifa
Constitución de 1993; la que, además, no permite que se puedan modificar las
leyes y normas que favorecen a las grandes empresas transnacionales y
nacionales. Es, como decimos, una “camisa de fuerza” que lo tiene sometido al
actual modelo económico. Otra razón es el no contar con una mayoría absoluta en
el Congreso de la república, con el
añadido que la bancada del partido que
auspicio a Pedro Castillo hoy se encuentra dividido y muy lejos de que le muestren un respaldo incondicional como
debería ser.
También
debemos considerar como otra de las razones o causas la poca capacidad del
mismo Pedro Castillo para designar a su entorno presidencial más cercano, aquellos
que deben ser sus ojos y oídos, esos que deben realizar los filtros necesarios
para que la persona que sea designada en algún cargo público, como ministro o
funcionario de diferente nivel, reúna los requisitos profesionales necesarios pero,
principalmente, una ética, moral y honradez comprobada; es decir, en algunos
casos estas razones dependen de su propia decisión. Claro que existen otras
causas más, vinculadas a sectores políticos de la población que no quieren perder
sus privilegios alcanzados con malas artes, y se ubican como “asesores” y
personal de confianza.
Como se
puede advertir existen poderosas razones para que el gobierno de Pedro Castillo
no pueda cumplir con lo que prometió en campaña, en especial temas
estructurales.
Pero
también existen responsables para que esas causas o razones descritas líneas arriba se hubiesen podido enfrentar y superar,
sino en todo, en una buena parte. Y, para explicarlo, hay que retroceder en el
tiempo hasta antes de las elecciones.
Lo
primero que debemos tener en cuenta es reafirmar, y esto es una opinión personal, que Izquierda Unida (IU) fue el único y último
intento electoral que se organizó de manera seria con un Programa de Gobierno
bien detallado y con buenos equipos de
trabajo de profesionales y técnicos capacitados. Liquidado IU, en las demás
campañas electorales cada organización política que se reclamaba de izquierda
participaba para “acumular fuerzas”, una frase que se hizo muy conocida y que servía
luego para llegar a votar “por el mal menor”.
Es decir, si evaluamos con madurez, ningún partido político que se
reclamaba de izquierda tomaba en serio esas participaciones electorales, pero
tampoco explicaban para que era esa famosa “acumulación de fuerzas”.
Con
todos esos antecedentes conocidos podemos decir que Perú Libre (PL) no fue
ajeno a estos vaivenes, incluso ya tenía experiencia de participar en procesos
electorales desde que se fundó Como Perú Libertario. Y, lamentablemente, continuando con esas
costumbres negativas nos chocamos con la triste realidad que nos muestra qué PL
no contaba con un Programa de gobierno 2021-2026, en caso que ganara las
elecciones nacionales, y mucho menos con personas idóneas que integren los equipos
técnicos capaces de enfrentarse a la derecha en los debates y poder ser parte
del personal que ingrese luego a la administración pública.
Pero lo
más insólito de todo esto son las posteriores declaraciones del líder máximo de
PL cuando afirma que “ellos no tenían intenciones de ser gobierno nacional y
que solo aspiraban a pasar la valla electoral”, algo que nosotros ya lo habíamos
expuesto mucho antes de esas declaraciones. Eso nos muestra claramente que PL
no estaba preparado, en ningún aspecto, para ejercer el gobierno nacional, Eso
explica porque, utilizando como pretexto la salida de Bellido del Gabinete
Ministerial, abandonan a Pedro Castillo incluso tildándolo de “traidor”
demostrándose que llegar a ser gobierno nacional nunca estuvo en los planes de
PL. La poca capacidad ideológica de sus
dirigentes no les ayudo a darse cuenta que, como partido de gobierno, tenían la
gran oportunidad de trabajar desde las bases el proyecto de Nueva Constitución
Democrática y Popular y la implementación de una Asamblea Popular
Constituyente.
Así
mismo con una mirada retrospectiva hacia la campaña de la segunda vuelta
podemos darnos cuenta que los momentos más críticos del enfrentamiento con la
gran prensa y la derecha no fueron afrontados por militantes de PL, sino por
aquellos que fueron motejados posteriormente como “caviares”. Y luego, ya Pedro Castillo como Presidente, tampoco
recibió por parte de PL el apoyo logístico adecuado y recursos humanos
suficientes para consolidar el Gobierno Popular. Esto también nos muestra por
enésima vez que un partido por sí solo no está en condiciones de desarrollar
las tareas de un gobierno nacional.
Incluso, las malas gestiones en algunos Gobiernos Regionales son una
clara muestra de lo que afirmamos.
Pero, si
el gran responsable de las limitaciones y tropiezos que tiene hoy Pedro
Castillo para implementar una gestión democrático-popular como debe ser es el
partido que lo auspicio, lo que debe quedar claro es que PL repitió los mismos
errores que por décadas han venido cometiendo, en el tema electoral, los
dirigentes de los partidos que se reclaman de izquierda, entre estos considerar
a sus líderes como “candidatos naturales” y no desarrollar políticas de alianzas que
realmente puedan satisfacer los anhelos de los más pobres del país.
El triunfo
electoral de Pedro Castillo y PL el 2021 fue un acontecimiento realmente
histórico, la llegada a la presidencia de la republica de un maestro
sindicalista con una posición de clase de compromiso con el pueblo y de un
partido político que teóricamente se reclama marxista-leninista-mariateguista
muchos no se lo esperaban. Es decir, algo que nunca había sucedido en el Perú
en estos 200 años de Republica. Y si este hecho no se llega a valorar en su
verdadera dimensión, por el significado que representa para los pueblos más
pobres del país, y no se llega a revertir el momento que está atravesando,
entonces el desánimo y la frustración podrá sepultar las esperanzas por
alcanzar cambios significativos de carácter económico y social para el pueblo. Es
muy importante que dirigentes y líderes populares sepan aquilatar las
experiencias vividas. Y ahora que se acercan las elecciones para gobernación y
alcaldías, en octubre próximo, los que aspiran a participar deben contar con su
Plan de gobierno y con los equipos humanos de comprobada honestidad y capacidad
profesional.
Pues
bien frente a una situación como en la que se encuentra el actual Gobierno
Popular, y si realmente desea hacer honor a esa caracterización entonces, ya es
momento que Pedro Castillo tiene que pasar a la ofensiva en todos los terrenos.
Su primera medida tiene que ser reajustar el equipo de apoyo que lo rodea y que
actualmente reemplaza a lo que debería haber sido el respaldo de la
organización política que lo auspicio, tiene que dejar de lado el tema
familiar, amical o coterráneo que actualmente predomina en su entorno. Una
segunda medida es tender puentes de trabajo conjunto con las organizaciones
populares que aún lo respaldan con convicción y decisión, eso hará que aquellos
que se ha alejado puedan retornarle su respaldo activo.
Un
tercer aspecto es empezar a cumplir con los compromisos económico-sociales de
su campaña electoral. Es cierto que ahora Castillo es Presidente de “todos los
peruanos” pero tiene que priorizar a aquellos hombres y mujeres que lo
respaldaron con su voto, en especial los de la primera vuelta. Ponemos como
ejemplo el tema del FONAVI, no puede
tratar de desconocer la totalidad de la deuda al igual que su Ministro de Economía, el neoliberal Graham. Su
decisión final, si no reconoce el pago total, podría marcar un punto de quiebre
con un buen sector de la población que se encuentra sumido en la pobreza y que
lo respaldo. Lo saludable seria que, reconociendo el pago total, fijara un
cronograma de pagos en función a como se va recuperando, de terceros, los
fondos que nunca se tenían que haber destinado a otras cosas. Recordemos, lo de
FONAVI no es un regalo, es dinero que el estado descontó a los trabajadores
pero que nunca cumplieron con el objetivo que manifestaron otorgar. Al igual
que el anterior hay otros temas sociales que con mayor inteligencia podrían ir
desarrollando en beneficio de la población.
Pasar a
la ofensiva también significa desarrollar un mayor control a las grandes
empresas que deben cumplir con sus compromisos tributarios y de respeto a la
población. Algunas empresas mineras y el propio Repsol pretenden mostrar que la
empresa privada extranjera goza de privilegios dando un mal ejemplo a los
empresarios nacionales que pretenden hacer lo mismo. Por eso, es importante
tomar medidas drásticas de una vez por todas.
No
podemos dejar pasar por alto algo que de todas maneras es importante de acuerdo
a las reglas de juego a las que se encuentra sometido el gobierno. Se necesita
inversión privada para obtener ingresos para el estado, pues bien es momento
que los Ministerios correspondientes convoquen a empresas nacionales y
extranjeras invertir en el país, pero sujetándose a los planes y requerimientos
que el estado a través de su Gobierno Popular plantee para garantizar
compromisos justos y equitativos.
Finalmente
consideramos que implementar una gestión democrático-popular, aun teniendo como
barrera la constitución fujimorista, si es posible realizarlo siempre y cuando
exista una organización política seria cuyos integrantes sean personas con
solvencia moral y capacidad técnica-profesional.
Febrero,
2022
FELIPE
TORRES ANDRADE
MI
PALABRA
http://laluchadeclasessigue.blogspot.com