ADELANTO / NUEVAS ELECCIONES,
O ¿RESTITUCION DEL PRESIDENTE PEDRO CASTILLO?.
Los acontecimientos sucedidos, no solo el 7 de diciembre
sino, desde el 6 de junio del 2021 nos demuestra que es muy difícil, por no
decir imposible, que los grupos de poder económico, la oligarquía y toda la
derecha en sus diferentes matices puedan aceptar nuevamente que en sus
elecciones burguesas sean derrotados por alguien que no represente a la clase
explotadora, como sucedió con Pedro Castillo.
Es más, cualquier reforma que hagan a sus leyes electorales
lo harán tratando de perfeccionar un mejor control para asegurar que cualquiera
que sea elegido presidente, sea un títere de quienes controlan el estado. Por
esa razón, ningún sector de la derecha acepta una Asamblea Popular
Constituyente y menos una Nueva Constitución que pueda reemplazar a la
Constitución fujimorista elaborada para mantener el modelo económico neoliberal
capitalista anti humano.
Ahora bien, lo sucedido el día 7 de diciembre no es otra cosa que el último zarpazo del fascismo criollo contra quienes osaron derrotarlos en su propio terreno electoral y contra quien, en el caso de Pedro Castillo, se atrevió a querer traerse abajo la Constitución fujimorista que es la “camisa de fuerza” que le impedía, y seguirá impidiendo, hacer cambios significativos a favor de las poblaciones que por años vienen reclamando un mejor trato por parte del centralismo limeño.
Entonces, preguntamos. ¿En una próxima elección, con la
misma constitución de 1993 y con las reglas de juego de la burguesía, de
obtenerse un resultado similar al de junio del 2021, creen que los perdedores
aceptaran fácilmente su derrota?¿Los que plantean adelanto o nuevas elecciones
consideran que esa es la solución a la situación concreta que vivimos?
Personalmente estamos de acuerdo con el sector de la
población en lucha que exige la LIBERTAD de Pedro Castillo y su RESTITUCION
como Presidente del Perú elegido por la mayoría de los peruanos, porque con él
si se podrá continuar con la convocatoria a la Asamblea Popular Constituyente y
posteriormente la elección de un Congreso de nuevo tipo.
Hay que entender que este es un momento histórico y ya no podemos lamentarnos de otra oportunidad perdida. Los pueblos del Perú profundo están en pie de lucha como no se había visto en mucho tiempo, incluso con la pérdida de casi una treintena de vidas en plena juventud. El problema es centralizar esas luchas y definir un objetivo concreto, de consenso, pero que no sea el de elegir “nuevas” personas que solo servirán para seguir manteniendo el modelo económico neoliberal capitalista y todas sus cosas negativas.
Tenemos que ser muy claros
y exigir a ciertos grupos que se reclaman de izquierda y/o del campo
popular que fundamenten porque quieren adelanto
o nuevas elecciones sabiendo quienes son los que tienen “la sartén por el
mango” en este tipo de cosas. Y, además, recordando las experiencias negativas vividas
a lo largo de los años, llegando a apostar, inclusive, por “el mal menor”. No
hay duda que la derecha ha logrado que el espíritu electorero predomine nuevamente
en muchos “luchadores” sociales.
Lamentablemente desde la desaparición de Izquierda Unida
hasta hoy no se ha podido forjar el Frente Político de Masas que el pueblo necesita
para enfrentar situaciones como las que hoy estamos viviendo, y que, muy bien,
hubiera servido para respaldar la decisión del Presidente Pedro Castillo y
cerrarle el paso al golpismo militar-legislativo-judicial y a su títere Dina
Boluarte.
Hoy es el momento, con los pueblos en lucha, de forjar ese Frente y canalizar como reclamo principal la LIBERTAD de Pedro Castillo y su RESTITUCION como Presidente del Peru.
30 / 12 / 2022
MI PALABRA
Felipe
Torres Andrade
Lima – Peru.
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